Trastorno por estrés agudo – Trastornos de la salud mental

El Trastorno por Estrés Agudo (TEA) es una respuesta psicológica a un evento traumático que ha ocurrido recientemente. Se caracteriza por síntomas similares al Trastorno de Estrés Postraumático (TEPT), pero el TEA se diagnostica cuando los síntomas duran al menos tres días pero no superan el período de un mes. Si los síntomas persisten más allá de este tiempo, se podría considerar un diagnóstico de TEPT. Es importante destacar que el TEA no se limita a situaciones de guerra o desastres naturales; puede surgir como resultado de eventos traumáticos más cotidianos, como accidentes de tráfico, asaltos o eventos inesperados que amenazan la integridad física o emocional de una persona.

Síntomas del Trastorno por Estrés Agudo:

  1. Reexperimentación del trauma:
    • Flashbacks: Vivencias involuntarias y perturbadoras del evento traumático.
    • Sueños o pesadillas recurrentes sobre el trauma.
    • Pensamientos intrusivos y recurrentes sobre el evento.
  2. Evitación del estímulo traumático:
    • Evitar recordatorios del trauma, como lugares, personas o actividades asociadas al evento traumático.
    • Evitar pensar o hablar sobre el trauma.
  3. Aumento de la activación y reactividad:
    • Respuestas exageradas de sobresalto.
    • Irritabilidad o enojo sin causa aparente.
    • Dificultades para conciliar o mantener el sueño.
    • Dificultades para concentrarse.
  4. Cambios en el estado de ánimo y cognición:
    • Dificultades de memoria, incluyendo olvidos sobre aspectos significativos del evento traumático.
    • Cambios en las creencias o expectativas sobre el mundo, uno mismo o los demás.
    • Estado de ánimo negativo persistente, como tristeza o desesperanza.

Causas del Trastorno por Estrés Agudo:

El TEA generalmente se desencadena por un evento traumático que provoca una respuesta de miedo, impotencia o horror en la persona afectada. Algunos ejemplos de eventos que podrían desencadenar el TEA incluyen:

  1. Accidentes de tráfico graves.
  2. Asaltos o agresiones.
  3. Desastres naturales.
  4. Acontecimientos violentos o amenazantes.
  5. Diagnóstico médico grave.
  6. Experiencias cercanas a la muerte.

Tratamiento del Trastorno por Estrés Agudo:

El tratamiento temprano es crucial para prevenir la transición del TEA al TEPT. Las intervenciones pueden incluir:

  1. Apoyo psicológico:
    • Terapia de apoyo para ayudar a la persona a procesar emociones y entender las respuestas al trauma.
  2. Desensibilización y reprocesamiento por movimientos oculares (EMDR):
    • Una terapia que utiliza la estimulación bilateral para ayudar a procesar el trauma.
  3. Terapia cognitivo-conductual (TCC):
    • Enfocada en cambiar patrones de pensamiento y comportamientos disfuncionales relacionados con el trauma.
  4. Farmacoterapia:
    • En algunos casos, se pueden recetar medicamentos, como ansiolíticos, para ayudar a manejar los síntomas.

Es importante buscar ayuda profesional si se experimentan síntomas de TEA, ya que el tratamiento temprano puede mejorar significativamente el pronóstico.